Dia 15 Paganico - Siena 65 Km (4060)
No salí demasiado temprano, pero si lo hice mas cargado de lo que llegue. Tanto de estómago como de equipaje. Me salieron a despedir todos, incluido el burro guardacoches. Y poco a poco deje atrás esa montañita llena de buena gente a la que alimenta mi gran hermano italiano.
Caían algunas gotas y los nubarrones se desplazaban a gran velocidad. Pequeños repechos toscanos, olor a tierra mojada y viña húmeda. Por suerte las tímidas gotas no pasaron de ahí, y llegue rapidamente a Siena. Enfilada en un monte y rodeada por murallas renacentistas. En las afueras junto a las casas unifamiliares estaba el atípico camping. Dejé las cosas y de nuevo pedaleando fui hacia el centro. Me sorprendió la cantidad de turistas y la bonita decoración de las calles. Sin pensar mucho deje la bici en la magnifica plaza con forma de concha. Empece a visitar el bonito casco antiguo. Entonces tras las calles estrechas sonaba un griterio, y de repente una cantidad de gente gritaba y seguia a un caballlo y su jinete. Todos se dirigian a la plaza. De otras callejuelas empearon a llegar mas multitudes, caballos y jinetes. Yo lo había leído en la guia, era IL PALIO. La antigua carrera de caballos medieval. Pero faltaban unos días... enotnces pregunte, era la presentación de los concursantes elegidos por cada uno de los barrios de la ciudad. Empecé a temer por mi bicicleta. Cuando por fin consegui llegar a la plaza y atravesarla; junto a la valla donde había atado a la bici solo vi a un policia con el candado en la mano, pero la bici ya no estaba. Los dos nos miramos con cara de sorpresa y me dijo donde se habían llevado la bici. Tras decirme un poco de todo y comprobar mi pasaporte me dejaron ir con la bici todavia manteniendo la cara de sorpresa...
Ya tenía una misión para el día siguiente comprar otro candado. Siena me gusto mucho, incluso pense en quedarme a ver la carrera, pero faltaban dos días y además era demasiada multitud para mi y mi bicicleta.
Caían algunas gotas y los nubarrones se desplazaban a gran velocidad. Pequeños repechos toscanos, olor a tierra mojada y viña húmeda. Por suerte las tímidas gotas no pasaron de ahí, y llegue rapidamente a Siena. Enfilada en un monte y rodeada por murallas renacentistas. En las afueras junto a las casas unifamiliares estaba el atípico camping. Dejé las cosas y de nuevo pedaleando fui hacia el centro. Me sorprendió la cantidad de turistas y la bonita decoración de las calles. Sin pensar mucho deje la bici en la magnifica plaza con forma de concha. Empece a visitar el bonito casco antiguo. Entonces tras las calles estrechas sonaba un griterio, y de repente una cantidad de gente gritaba y seguia a un caballlo y su jinete. Todos se dirigian a la plaza. De otras callejuelas empearon a llegar mas multitudes, caballos y jinetes. Yo lo había leído en la guia, era IL PALIO. La antigua carrera de caballos medieval. Pero faltaban unos días... enotnces pregunte, era la presentación de los concursantes elegidos por cada uno de los barrios de la ciudad. Empecé a temer por mi bicicleta. Cuando por fin consegui llegar a la plaza y atravesarla; junto a la valla donde había atado a la bici solo vi a un policia con el candado en la mano, pero la bici ya no estaba. Los dos nos miramos con cara de sorpresa y me dijo donde se habían llevado la bici. Tras decirme un poco de todo y comprobar mi pasaporte me dejaron ir con la bici todavia manteniendo la cara de sorpresa...
Ya tenía una misión para el día siguiente comprar otro candado. Siena me gusto mucho, incluso pense en quedarme a ver la carrera, pero faltaban dos días y además era demasiada multitud para mi y mi bicicleta.
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